







Poco a poco pero de una manera inexorable, como el tiempo, van desapareciendo las antiguas tabernas madrileñas.
En el Madrid actual, como en toda gran urbe no hay tiempo que perder, las largas jornadas de trabajo y las distancias hacen que vayamos de aquí para allá con mucha prisa y con escasos momentos para el sosiego.
En este artículo voy a mencionar algunas de las tabernas en las que aún tenemos la posibilidad de pasar un rato sumergido en la historia de la capital.
Libro Tabernas de Madrid
Taberna Antonio Sánchez.
En el castizo barrio de Lavapiés, más concretamente en la calle Mesón de paredes nº 13 se encuentra la que puede ser la taberna con más solera de Madrid.
Cuando en Madrid aún no se veneraba a la Virgen de la Paloma o cuando la Iglesia de San Francisco el Grande estaba aún por inaugurar, ya se servían vinos en esta taberna.
El ambiente taurino de la taberna nos hace recordar que pasó por las manos de varios toreros famosos, incluyendo a Antonio Sánchez (hijo) que también fue matador de toros.
Muchos son los artistas que dejaron huella en la taberna, cabe destacar el pintor Zuloaga y la poeta Gloria Fuertes.
Casa Alberto
Fundada como tienda de vinos en el año 1827 pasó por manos de varios emigrantes segovianos hasta que llegó en 1924 a ser regentado por Alberto de Dios que le dio su nombre.
En casa Alberto podemos admirar su antiguo mostrador donde las frascas de vino se refrescaban con el correr del agua.
Las especialidades actuales de la casa son el rabo de toro, las manitas de cordero y los callos.
Casa Labra.
Esta casa famosa por sus soldaditos de Pavía ( bacalao rebozado ) se fundó en el año de 1860. Ha sido regentada desde los inicios por manos asturianas y fue su tercer dueño quien le dio el nombre actual.
Situada en la calle Tetuán número 12 es también famosa porque allí se fundó el partido socialista obrero español.
Casa Oliveros.
Esta tasca tiene su origen allá por el año 1857. Oliveros compra la taberna en 1921 por 10.000 pesetas, aunque al principio era solo taberna y vivienda en el interior, pronto en el año 1922 pasó a ser casa de comida.
En la puerta hay un bello azulejo en el que figura un cocinero con un jamón y una curiosa frase ¨para comer bien y barato, San Millán nº 4. Curiosamente durante la guerra civil se tapó el anuncio para no ofender a los que pasaban hambre.
Espero que os haya gustado este post y os invito a conocer este magnífico patrimonio que tenemos en Madrid que son sus tabernas.
Libro Tabernas de Madrid.
Texto: Carlos Osorio y fotografías de Álvaro Benítez. Publicado por ediciones la librería.